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Una jovencita está tan borracha que poco puede hacer para evitar que se la follen, suponiendo que sus intenciones sean esa, ya que no la vemos que se resista mucho. La tiran en la cama quitándole las bragas, y la penetran metiéndole la polla directamente por el culo, cosa que le entra fácilmente. No solo la penetran duro por detrás sino que a la vez le meten casi un puño por el coño, llegando a entrarle los cuatro dedos y hasta media mano sin problema. Cuando se corre queda satisfecha, sonriendo cachonda por el sexo duro que le ha dejado la entrepierna toda húmeda.